Emplear pértigas para el tendido de la línea de vida.
Absorbedor de energía con doble elemento de amarre integrado para
ascender y descender por los apoyos, para colocar la primera línea de
vida, en lugar de la utilización de pértigas.
El ascenso, descenso y desplazamientos verticales siempre con arnés
de seguridad con dispositivo anticaída.
Para los desplazamientos laterales se puede emplear el absorbedor
de energía con un solo elemento de amarre unido a un punto de anclaje
seguro y siempre dicho punto se encontrará por encima del punto de
enganche del arnés, teniendo siempre presente que es obligatorio
emplear siempre un sistema anticaída como mínimo.
Para los desplazamientos laterales se usa una línea de vida de 7
metros individual, con un nudo de 8 realizado por el proveedor, al cual
se le conecta el sistema anticaída, hasta salir por la escalera de amarre,
poniendo de forma intermedia cintas planas textiles. Todo debe estar
certificado y cumplir las normas correspondientes. También puede
utilizarse tambor anticaídas retráctil con absorbedor de energía interno,
anclado a la estructura de la torre lo más elevado posible.
El ascenso a puntos elevados y el descenso de los mismos, se hará
siempre con las dos manos libres. Si han de transportarse herramientas
utilizar la bolsa portaherramientas.
Si hay más de un operario en la torre, se situarán a la misma altura
o en tresbolillo, por las caras externas de la torre.
Antes de subir, estudiar, definir y comprobar la solidez y estabilidad
del apoyo, venteándolo en caso necesario. Si el arriostramiento no
asegura su estabilidad y solidez, no subir. Poner especial atención a los
esfuerzos de torsión, a los desequilibrios de tracciones y a los esfuerzos
secundarios en postes de hormigón (compensación de esfuerzos).
Para desplazamientos por las cadenas de aisladores, emplear escaleras de amarre o suspensión, según los casos. Estas han de estar aseguradas
mediante una cadena al apoyo. Para desplazarse por las escaleras de
amarre, se utilizará el sistema indicado en los desplazamientos laterales,
pero nunca se amarrarán a la propia escalera de amarre. En cuanto a
las escaleras de suspensión se utilizará la línea de vida que tiene
incorporada.
Trabajos con protecciones: Evitar subir a las protecciones, ya sean
metálicas o de madera. Realizar el montaje de la estructura (pórtico)
o de otros elementos (poleas), desde el suelo, e izarlo posteriormente.
En el caso de que sea imprescindible subir, extremar las precauciones:
asegurarse que está estabilizada, colocando vientos, y perfectamente
anclada al terreno, mediante un pistolo clavado en la base en el caso
de protecciones metálicas. Si al comenzar a subir se desestabiliza,
descender inmediatamente. Una vez sobre la protección, no realizar
nunca maniobras que provoquen esfuerzos que descompensen el apoyo.
Como regla general, no se deberá trabajar sobre apoyos en caso de
heladas, nieve o lluvias, ya que se agravarían en gran medida los
trabajos mencionados anteriormente.
Escaleras de las obras y de las instalaciones: Aseguramiento.
Al subir o bajar por una escalera se cogerá al pasamanos.
Pisar todos los peldaños, sin saltarlos.
Usar calzado correcto.
Informar de cualquier anomalía observada en las escaleras.
Usar correctamente las escaleras de mano, evitando utilizar otros
elementos en su lugar.
Las escaleras de tijera deben ir provistas de tirantes de seguridad
y no utilizarse como escaleras de apoyo.
Las escaleras de apoyo deben tener dispositivos de apoyo antideslizante
en la parte inferior o disponer de enganche en la parte superior.
Evitar escaleras defectuosas o resbaladizas. Mantenimiento.
Instalar líneas de vida cuando sea necesario (apoyos, dinteles, etc.).